sábado, 14 de marzo de 2015

COMPARTIENDIO DESDE LA EXPERIENCIA MATRIMONIAL

LA ALEGRIA DEL EVANGELIO

Desde Roma


A la hora que te escribo, estarás viendo desde la ventanilla una vez más Roma, desde ese sillón del avión podrás contemplar la ciudad eterna, a través de la ventanilla, seguro que cuando aterrices uno de tu hermanos franciscanos pasará recogerte, ellos en el Convento habrán cenado, y estarán con sus últimas oraciones del día, dándole gracias a Dios por todo lo del día. Es tiempo de Cuaresma y es tiempo de conversión.

Nosotros hemos llegado a casa al igual que tu, Fray Vidal, también nos espera la familia, hijos, en algunos casos nietos y volveremos ambos a la rutina, tú a levantarte a las 5,30 a preparar tu celda y tus oraciones de la mañana y nosotros nuestros trabajos y quehaceres, pero donde ambos coincidiremos es que hablaremos de un fin de semana de Ejercicios Espirituales, en “el” Loreto (Espartinas) donde la vendita Madre Patrona del Aljarafe Sevillano nos acogió, nos trajo un fraile franciscano, y nos reveló la Alegría del Evangelio.

Ambos volveremos a ponernos frente a frente con nuestros amigos y compañeros y les diremos lo felices que hemos sido, este fin de semana, donde trabajamos las fichas de la sentada, las fichas nocturnas, y podremos seguir escuchando esa voz que nos acompañó en la Adoración Nocturna.

Y volveremos a recordar algunas partes de esas Florecillas de Cuaresma:

 Dame tu mano, María, la de las tocas moradas...” Llévanos Señora por la cuaresma de los dolores y del mundo con el malva de la esperanza enjugada en tus mejillas, doliente de tu pecho herido de amargura. Corazón creyente de pie ante la cruz de los crucificados de ahora y de toda hora. Para susurrar de nuevo de tus manos, en la cuaresma, al oído de la Iglesia, el canto del incienso de jóvenes retamas floridas del Palancar: que la cruz es la meta de toda cuaresma, de toda vida, de toda pascua florida.

Desde Sevilla, Auxi y José Antonio y en Roma, Fray Vidal Rodríguez López ofm.


No hay comentarios:

Publicar un comentario